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miércoles, 28 de julio de 2010

La fiesta brava

Hoy se aprobó en Cataluña, España, una iniciativa avalada por cerca de 180,000 ciudadanos para prohibir las corridas de toros. Dicha ley entrará en vigor hasta el 1 de enero del 2012. Con 68 votos a favor, 55 en contra y 9 abstenciones la Cámara regional catalana aprobó la Iniciativa Legislativa Popular (ILP). Será la segunda región española que prohíbe las corridas de toros, antes lo hicieron las Islas Canarias, gracias a una ley regional de protección de animales, que data de 1991.

La ILP fue promovida por la plataforma Prou! (¡Basta!) en defensa de los animales. Tuvieron que enfrentarse a los defensores de las corridas que argumentaban que el espectáculo taurino es una manifestación artística tradicional, y que por lo tanto no debía desaparecer. En México, muchas organizaciones en pro de los derechos de los animales aplauden y toman como bandera este hecho, se exige que se haga lo mismo en México, ya que el sufrimiento de los animales es brutal e inhumano. Y es muy cierto. Probablemente a muchos de ustedes les ha llegado un correo electrónico en cadena en el que describe con texto e imágenes el calvario por el que pasasn (más bien, hacen pasar) a los astados. Quién sabe si es cierto o no todo lo que dicen, eso deberíamos de preguntárselo a alguien relacionado directamente con este espectáculo (odio decir que es una fiesta, prefiero dejarlo como espectáculo... inhumano y salvaje, pero espectáculo al fin). Lo cierto es que las imágenes indignan y llenan de rabia a muchos. Desde luego a los aficiionados a esto dudo mucho que los haga siquiera pestañear.

Y a todo esto, ¿se pueden cancelar las corridas así nomás? Desde luego que no, de este negocio dependen muchas personas. Por principio de cuentas, los ganaderos que proveen a los astados, los toreros, banderilleros. Bueno, ellos son los que ganan bastante lana, así que el impacto en sus carteras sería duro pero no dramático. Los que suifrirían el desempleo serían los taquilleros y revendedores (es su chamba al final de cuentas), los cubeteros y todos aquellos que venden sus esquilmos dentro de las plazas, los que venden sus tacos y demás puestos fuera de ellas. Aquí viene la primera pregunta incómoda: ¿es justo que por evitar el sufrimiento de los animales se deje sin sustento a cientos o miles de personas y a sus familias, a sus niños? Manipuladora pregunta, igual que el correo-cadenita citado.

Otro dato: cierto que Cataluña aprobó esta ley, pero por qué hasta el 2012, por qué no para el siguiente fin de semana. Probablemente por lo descrito en el párrafo de arriba. Si ustedes creen que los catalanes son muy civilizados y que por eso ya no quieren más toreo, puede que esten en un error. Pese a que sólo hay corridas en la plaza de Barcelona (en Cataluña), tienen muy arraigadas las tradiciones taurinas, como los "correbous", que son espectáculos callejeros con toros (parecido a la Pamplonada), a los que se les prende fuego en las astas aunque no son sacrificados, y a los que no afectaría esta iniciativa. Esto ha servido para que los defensores de la tauromaquia digan que es hipócrita la prohibición.

Con la decisión del Parlamento de Cataluña -una de las regiones con más autogobierno-, se crea la incertidumbre sobre el futuro de las corridas en un país donde el toreo está identificado por amplios sectores sociales como "Fiesta Nacional". Pero como les sugería, la cosa no va por ahí. En España se vive un regionalismo muy arraigado y encarnizado. La gente no dice "soy español", más bien hacen referencia a las regiones en donde nacieron. Asturianos, catalanes, vascos (¿les suena la organización separatista vasca ETA?), manchegos, gallegos (los preferidos de los chistes), valencianos... No es como aquí, que habemos chilangos, tapatíos, jarochos o regios. Al final del día nos identificamos como mexicanos. Esto viene a cuento porque el prohibir las corridas es una forma de independizarse o separarse culturalmente de "España". En la península, la referencia a España o a los españoles es más bien para señalar a los madrileños, eso gracias a la guerra civil y al franquismo. Todo aquello que huela a "España" o a Madrid no es muy bien visto que digamos. Retomando el futbol, fue un secreto a voces que anteriores selecciones españolas no triunfaban por ese regionalismo, el estar todos abanderados por España no hacía sentir cómodos a los jugadores. Se cuenta que uno de los factores para que esta selección ganara el mundial, fue que por primera vez todos se sintieron españoles. Pero aún así, la página web del FC Barcelona hace mención de que 8 jugadores suyos ganaron la copa del mundo con la selección de España, haciendo notar que no sienten ese triunfo totalmente como suyo. No dice "selección española" o "nuestra selección", y es por ese regionalismo. Y más allá de la prohibición de las corridas de toros en Cataluña, ahora se hacen pronósticos sobre lo que ésta podría significar de cara al futuro en otras regiones españolas en las que también se ha abierto el debate.

De ese debate también estarán pendientes países como Ecuador, Colombia, Francia, México, Perú, Portugal y Venezuela, países donde los toros son una tradición.

Mexicano comprometido con la Patria. CEO y Chairman de Pakinscorp. Valiente opinador y empedernido americanista. Batifan y escribidor en este sagrado espacio.

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